Urbanidad
El término urbanidad es equivalente a buena educación, civismo, cortesanía, forma fina de actuar adquirida en el trato de la gente de educación cultivada.
El nombre urbanidad deriva directamente de la palabra latina urbanitas,[1] que expresaba entre los romanos el espíritu de la ciudad - urbs - por oposición a rusticitas, de la cual procede el nombre rusticidad del que nos servimos para expresar el espíritu y las maneras poco pulidas de los campesinos.
También es una cortesía y de tener buenos modos.
Se dice que la palabra cortesanía sirven para expresar un grado más elevado de pulidez o finura que el de urbanidad por suponerse adquiridas, como su propio nombre indica, por el roce y con las maneras de la Corte que se suponen son más finas que los de una ciudad o pueblo.
Algunos creen que la palabra urbanidad de los latinos corresponde a la de aticismo de los griegos. En el Tesoro de la lengua castellana se lee ya: Urbanidad, vale trato cortés o apacible.
Referencias
editarV. Joaquín Bastús (1862). El Trivio y el cuadrivio, o, La nueva enciclopedia: el cómo, cuándo y la razon de las cosas. la Viuda é Hijos de Gaspar. pp. 351-.
- ↑ Real Academia Española. «urbanidad». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).