Josef Fritzl: "Nací para violar"

Viena, Austria
23 de octubre de 2008

Josef Fritzl, quien secuestró y violó a su propia hija durante más de veinte años, afirmó en una sesión con peritos psicológicos que nació para violar. Según los expertos, el denominado monstruo de Amstetten fue maltratado por su madre en la infancia que lo afectó emocionalmente, pero está en condiciones de ser juzgado.

"Su narración describe un clima familiar imprevisible con agresiones humillantes y sin motivo por parte de la madre –expresó la psiquiatra Adelheid Kastner en un informe que envió a la fiscalía–. Su infancia lo predispuso idealmente a una invalidez emocional". Kastner también explicó que el duro trato que tuvo por parte de su madre provocó una "incapacidad de sentir compasión" y la necesidad de "poseer completamente a un ser humano".

En el análisis, que fue publicado por un diario local, se habló de una "vena malévola" por parte del violador. No obstante, los peritos confirmaron que "puede responder de sus acciones".

De acuerdo con el informe de 130 páginas, Fritzl manifestó que fue un hijo no deseado y que su madre lo golpeaba sistemáticamente. Por su parte, el padre del austríaco murió debido a la Segunda Guerra Mundial durante la juventud del violador.

Finalmente, el reporte destacó que, si lo declaran culpable, debería ir a una institución debido a que podría cometer "actos con graves consecuencias" en una prisión común.

Nacido en 1935, Joseph Fritzl está acusado raptar y violar a su hija Elisabeth durante más de 24 años. La rehén, quien estuvo todo ese tiempo atrapada en el sótano de la casa, tuvo siete hijos con su padre. Tres de ellos fueron criados por Fritzl y su esposa, otros tres estuvieron en cautiverio con la madre y uno murió al nacer. En los años 70, ya había sido condenado por entrar a la casa de una joven y violarla.

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